El canal de medios del ejército chino ha publicado un documental, obviamente en chino pero traducido por Jennifer Zhang, en el que se presentan los objetivos estratégicos de la guerra contra Japón y Taiwán, especialmente contra Japón, visto como objetivo principal. Entonces, esto no es más que la aniquilación total de la tierra del Sol Naciente y su división en cuatro estados vasallos. El ejército chino está preparando silenciosamente el fin de Japón, y probablemente también Tenno, terminando el trabajo iniciado en la Segunda Guerra Mundial.
Aquí está el video, luego la transcripción, en italiano, del texto:
Primero, cuando creamos una estrategia de antes de la guerra, necesitamos establecer dos direcciones principales de ataque, a saber, Taiwán y Japón continental. Taiwán será la principal dirección de ataque, pero podemos cambiar la dirección hacia Japón continental en cualquier momento.
En caso de no uso de armas nucleares, debemos aprovechar la oportunidad para cambiar la dirección principal del ataque, de hecho, debemos establecer a Japón como la dirección principal del ataque antes de la guerra. Despliegue fuerzas militares en Japón y, con esta premisa, cubrimos Taiwán al mismo tiempo. Atacar a Japón es el lado principal. Empieza por Taiwán, culmina en Japón con todas sus fuerzas y termina con la rendición de Japón.
En la práctica, el ataque a Taiwán es casi una distracción, especialmente para aliados, como Estados Unidos. El gran objetivo es Japón.
En segundo lugar, el contraataque contra Japón no puede limitarse a las islas Ryukyu y las islas del suroeste de Japón. Debemos establecer las cuatro islas del Japón continental como nuestro objetivo estratégico, porque nuestro objetivo estratégico es la aniquilación de Japón, al igual que al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando Japón declaró la rendición incondicional. De modo que la guerra contra Japón es en "términos ilimitados", una "guerra ilimitada". Utilizaremos todos los medios de guerra, incluidas las armas nucleares tácticas y las armas nucleares estratégicas.
Entonces no sería un ataque con objetivos tácticos, sino uno con objetivos estratégicos muy amplios. El objetivo es la destrucción total de Japón.
En tercer lugar, uniremos fuerzas con Rusia y Corea del Norte. Tres flechas (países) disparan juntas para golpear el continente japonés en profundidad y amplitud.
Por tanto, Pekín da por sentado que no actuaría solo. ¿Tiene pactos formales con Rusia, el oponente más formidable, si lo hay? ¿La participación de Corea del Norte implicaría la de Corea del Sur?
Cuarto, la primera guerra será la guerra final, incluso con una guerra convencional no nuclear, seguiremos ganando a Japón.
En quinto lugar, nuestra voluntad nacional de guerra, nuestro sistema de movilización nacional y nuestra tolerancia a la guerra aniquilarán la voluntad de guerra de Japón. Si Japón ataca a China para separar a Taiwán de nuestro país, seguramente despertará nuestra justa indignación nacional y le dará al pueblo chino la oportunidad de tomar represalias y vengarse .
Se supone que Japón se ha convertido en una nación "blanda". Por lo general, cuando comienzas con tales prejuicios, te golpean clamorosamente.
La participación de Japón en la guerra bloqueará la culminación de nuestra gran causa de unificación y ciertamente obstaculizará el gran rejuvenecimiento de la nación china. Ante tal resistencia, sin duda volveremos a movilizar a toda la nación para luchar contra Japón. Movilizaremos a toda la nación y avanzaremos hacia el mecanismo de guerra, movilizaremos toda la fuerza de nuestra nación, nos sacrificaremos con valentía, elevaremos infinitamente la forma de la guerra a la guerra nuclear y destruiremos resueltamente a Japón.
En sexto lugar, después de derrotar a Japón, debemos tomar medidas más estrictas que en la Segunda Guerra Mundial para dividir a Japón y eliminar por completo las causas fundamentales de la guerra dividiendo las cuatro islas japonesas en cuatro estados independientes que no se pertenecen entre sí. De acuerdo con los deseos de la gente de cada isla, cada isla debe establecer sus propias instituciones políticas nacionales y, bajo la supervisión de China y Rusia, cada una debe formular su propia Constitución de Paz, y cada uno de los cuatro países debe estar bajo la administración. de China y Rusia, con tropas de China y Rusia, y las islas Ryukyu deberían separarse de Japón y colocarse bajo la administración de China o convertirse en un estado independiente.
El peligro del plan estratégico militar chino es que parte de una serie de preconcepciones estratégicas y morales que no necesariamente se hacen realidad, de hecho algunas de las cuales son claramente improbables. La intervención de Corea del Norte es posible, pero llevaría a la implicación del Sur, que no puede permitirse permanecer inactivo y aislado, rodeado de países hostiles. La intervención de Rusia es aún más improbable, porque conduciría a una participación estratégica directa de Estados Unidos y la OTAN. Además, se olvida que la rendición de Japón en 1945 tuvo lugar solo después de la completa destrucción de su aparato industrial, no antes. Además, se asume que Estados Unidos no envía un contingente naval, y también ignora la flota de Japón, una de las más fuertes del mundo y que operaría en un entorno conocido.
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