Todas las escaramuzas gubernamentales por reaperturas y toques de queda

Todas las escaramuzas gubernamentales por reaperturas y toques de queda

Lo que se dice en la mayoría gubernamental sobre reapertura y toques de queda

Mario Draghi, quien el 25 de abril de 1945, fecha simbólica de la liberación de Italia del nazi-fascismo encaramado en el norte, aún no había nacido pero luego habría aprendido de familiares, libros, periódicos y cualquier otra cosa lo suficiente para poder decir correctamente ayer, y en primera persona generosamente en plural, que "no todos éramos buenas personas". Que no todos sabían o querían elegir la parte correcta. Que quizás peor que los que eligieron el bando equivocado fueron los indiferentes.

Bien dicho, por supuesto. Pero en el mismo día de tan honesta y grosera recreación del pasado al pobre Primer Ministro – quien desafortunadamente no podrá quejarse públicamente por obvias razones de diplomacia política, digamos así – pasó a escuchar a un importante exponente de la gran mayoría que lo apoya presionando a otro partido para que se salga, aun sabiendo que esto debilitaría el gobierno de emergencia buscado por el jefe de Estado y en el que confían regularmente las Cámaras. Ni siquiera hoy, por tanto, a pesar de las debidas proporciones, por el amor de Dios, somos todos buenas personas como comunidad política.

Quien empuja por la crisis, al menos con palabras, es el secretario del Partido Demócrata Enrico Letta, aunque recientemente asumió el cargo en el lugar que pertenecía a Nicola Zingaretti, reconociéndose plenamente en el gobierno de Draghi, que en cambio parecía haber sido más sufrió que le gustó su antecesor. Quién se había preocupado tan poco, o tan mal, con el equipo de ministros que te embarcó o te dejó que se olvidó por completo de las mujeres. Que luego el sucesor compensó de alguna manera enviándolos a la cima de ambos grupos parlamentarios.

El componente del gobierno que no gusta al nuevo secretario del Partido Demócrata, como al anterior, es el de la Liga Norte bajo las órdenes políticas de Matteo Salvini. El cual, según Enrico Letta, quisiera ser de lucha y gobierno juntos, como si el resto de componentes, incluido el del Partido Demócrata, por no hablar del grillini sufriendo una refundación sísmica – perdón por el oxímoron – y por tanto en pleno caos, eran de cristal del gobierno, no se preocupen por proteger los intereses reales o supuestos de sus electores de los efectos de la pandemia viral.

Lo que Enrico Letta demostró que le faltaba con su salida, que de alguna manera sorprendió incluso a la presentadora de televisión que lo entrevistó, Lucia Annunziata, es el realismo. También enseñó en París en los seis años y más de exilio asignados después de haber sido sacado del Palazzo Chigi por Matteo Renzi. Hablo del realismo, por ejemplo, con el que un supercrítico de Salvini como Giuliano Ferrara, que lo llama "el infiltrado", lo reconoció honestamente hoy en su hoja , gracias a los errores de Enrico Letta y afines, que no lo hizo. Ganar pero la batalla quedó abrumada para reclamar los méritos de las llamadas aperturas en el manejo de la pandemia y descargar en otros los deméritos de los cierres persistentes, o las aperturas mal hechas y peor gestionadas.

En las últimas horas, el enfrentamiento entre un grillino subsecretario de Gobernación y el ministro de Relaciones con las Regiones de la fuerza: el primero con ganas de ver multado y reportó a partir de esta noche cuántos serán sorprendidos en la calle a las 22 y un minuto, el segundo, sostenido en el Palazzo Chigi, si no lo he entendido mal, dispuesto a dar tiempo a los veteranos para que se vayan a casa. Y por supuesto disfruta políticamente: "el irreversible" Salvini, según el titular morado del diario Domani .


Esta es una traducción automática de una publicación publicada en StartMag en la URL https://www.startmag.it/mondo/tutte-le-scaramucce-di-governo-su-riaperture-e-coprifuoco/ el Mon, 26 Apr 2021 05:07:43 +0000.