¿Qué cambiará en Alemania con Laschet al frente de la CDU?

¿Qué cambiará en Alemania con Laschet al frente de la CDU?

Centro, confianza e integración fueron los conceptos que Laschet comunicó en su discurso en el congreso. Aquí están las ideas y los programas del nuevo presidente de la CDU en Alemania. El estudio en profundidad de Pierluigi Mennitti de Berlín

Al final no hubo sorpresa y los delegados de la CDU eligieron al candidato favorito desde el principio como nuevo presidente. Armin Laschet sucede a Annegret Kramp-Karrembauer, pero sobre todo se convierte en el rostro de la post-Merkel. Para la CDU y probablemente también para Alemania. Porque, contrariamente a lo que creen muchos observadores, Laschet se muere por convertirse en canciller, casi más que el gran derrotado Friedrich Merz , y hará todo lo posible por recuperar el consenso que las encuestas le niegan por ahora.

Nunca como en las próximas elecciones, las posibilidades son muy altas de que el candidato de la Unión (la alianza de los dos partidos cristianos gemelos, CDU y CSU) también se convierta en el próximo canciller. Laschet no tiene intención de dejar pasar la oportunidad a favor de los dos grandes invitados de piedra del congreso digital: el líder de la CSU Markus Söder y el ministro de Sanidad (y aliado en la boleta con Laschet) Jens Spahn, elegido vicepresidente por la congreso. Con los galones del ganador, que siempre arrojan una nueva luz y a menudo transforman patitos feos en cisnes, intentará volver a la cima para aprovechar su oportunidad de encarnar al post-Merkel hasta el final.

El tiempo no es largo y la suya será más una carrera de obstáculos hasta el momento en que la Unión tenga que decidir quién se postulará para la cancillería. Ya en dos meses, el 14 de marzo (si la pandemia lo permite), su nueva CDU tendrá que afrontar dos rondas electorales muy importantes: en Baden-Würrtemberg, donde gobierna como socio menor de los Verdes y en Renania-Palatinado, donde está en cambio en el oposición. Estos son dos Länder que alguna vez fueron baluartes seguros de la Democracia Cristiana, que han caído en los últimos años debido a una sorprendente incapacidad de la clase política regional para comprender las necesidades y tendencias que emergen de los territorios.

En los quince años de la cancillería de Merkel, la política local de la CDU sufrió mucho por el aplastamiento excesivo del partido en su dimensión gubernamental federal. Laschet tendrá que partir de ahí, de las regiones, un terreno que le es agradable ya que gobierna el Land más poblado de Alemania (Renania del Norte-Westfalia) tras ganar de forma contundente las elecciones de 2017.

El peso de Angela Merkel sin duda se reflejó en el voto de los delegados. Laschet fue el candidato que más interpretó la idea de continuidad con los veinte años de canciller. Pero esta vez, a diferencia de lo que ocurrió con Kramp-Karrembauer, la congresional fue la victoria de Armin Laschet, de su capacidad para mantener el complejo y variado grupo merkeliano, para sumar una parte del componente conservador gracias a la alianza con Spahn y presentar a los delegados la perspectiva de una fiesta abierta, moderna y amable. No será una Mini-Merkel.

Friedrich Merz es el gran perdedor. La segunda derrota en dos años socava las ambiciones de volver a la política por la puerta principal. No es seguro que acepte papeles secundarios en el nuevo partido o en un futuro gobierno, ni que Laschet se los ofrezca. Los dos han colaborado en el pasado en Renania del Norte-Westfalia, pero las relaciones se han roto en esta larga campaña del Congreso. Hace poco más de dos años Merz perdió por un pelo frente al candidato de Merkel, en un momento de baja popularidad de la canciller, cuyo liderazgo en el gobierno y en el partido parecía empañado. Era objetivamente difícil que el papel de outsider pudiera producir mejor suerte en una fase en la que Merkel ha recuperado el carisma y el poder gracias a la gestión de la pandemia. Un viejo zorro político como Wolfgang Schäuble, que lo había apoyado en 2018, sugirió que se rindiera porque el panorama general había cambiado. Inútilmente. El resultado final dice que Schäuble tenía razón.

Centro, confianza e integración fueron los conceptos que Laschet comunicó en su discurso en el congreso. El centro como imán de la política de partidos, no una retórica grandilocuente sino "una caja con herramientas artesanales para construir un camino hacia el centro". La confianza se transmite en las relaciones partidistas y en la sociedad: el líder debe ser un capitán que coordine y oriente el trabajo en equipo. La integración como antídoto contra el veneno de la polarización: agregar, involucrar, unir. Todo resumido en la herencia moral paterna (momento retórico muy acertado en su discurso): su padre, que antes de convertirse en maestro de primaria había sido director de una mina, siempre decía que cuando estaba en las entrañas de la mina no importaba saber de dónde venía. el compañero de trabajo, pero si se podía confiar en él. Un mensaje que es el programa de trabajo para las próximas semanas: construir un grupo de trabajo que vuelva a poner al partido en el centro de la acción política y no al gobierno. El liderazgo de Laschet también se medirá en su capacidad para equilibrarse, cerca y lejos, de la incómoda figura de Angela Merkel. Una tarea delicada en una fase dominada por la lucha contra la pandemia, en la que destaca la acción del gobierno.

Último capítulo, Europa y con él Italia. El candidato más europeísta del trío resultó elegido y, al menos sobre el papel, el más favorable para Italia. En la campaña del Congreso, siempre ensalzó el Plan de Recuperación como una gran herramienta financiera para favorecer la recuperación de los países europeos, destacando la contribución común y la importancia de que todos los miembros de la UE salgan juntos de la crisis económica tras el covid. Al contrario de lo que probablemente hubiera sucedido con Merz, el avance alemán en Europa logrado durante la pandemia estará a salvo. Si será la base para un relanzamiento de la UE o si seguirá siendo un punto de inflexión cronometrado, vinculado a la contingencia de una emergencia, también dependerá de cómo y si otros países aprovechan la oportunidad de recuperación. Empezando por Italia.


Esta es una traducción automática de una publicación publicada en StartMag en la URL https://www.startmag.it/mondo/che-cosa-cambiera-in-germania-con-laschet-alla-guida-della-cdu/ el Sat, 16 Jan 2021 14:55:44 +0000.