Contributiva, remunerativa, capitalización, distribución

Muy rápido, tengo que llegar antes de que nieve (prevista para esta noche).

Por algunos comentarios del post anterior, y por algunas regurgitaciones de la alcantarilla negra, intuyo que una mayoría significativa de italianos vive en un malentendido: aquel según el cual la transición al sistema contributivo (reforma Dini, para los amigos ley 335 de 1995 ) habría hecho que el sistema de pensiones fuera más sostenible porque cada uno financiaría su propia pensión con las cotizaciones que paga.

Es decir, muchos confunden el método de cálculo contributivo con la adopción de un sistema de capitalización .

Desgraciadamente (y evidentemente) no es así, y como no querían hacéroslo entender (de otro modo lo habríais entendido) y por tanto no os resultará fácil creerme, proyectando una película ya vista con el euro Le proporcionaré inmediatamente la auctoritas de un verdadero economista, prof. Brunetta, actual presidente de CNEL, quien en su audiencia ante la Comisión que tengo el honor de presidir precisó lo siguiente:

(puedes encontrar el informe aquí ). El cambio en el método de cálculo (anclado a las cotizaciones pagadas y no a los últimos salarios percibidos) no implica un cambio en el sistema de financiación, ¡y Dios no lo quiera! Si hubiéramos pasado de un sistema de reparto a un sistema de capitalización como éste, "de bbotto", habría sido una tragedia, porque evidentemente cohortes enteras de pensionistas se habrían quedado sin pensiones. ¿Cómo? De no ser por el simple hecho de que las cotizaciones de los trabajadores en activo, en lugar de financiar las pensiones actuales, habrían ido, como nuevas monedas de oro, al campo de los milagros financieros , donde se habrían multiplicado (salvo la crisis de Lehman…) mientras esperando para financiar futuras pensiones.

¡No se puede dar el mismo euro a un pensionista e invertirlo en alguna parte al mismo tiempo!

Dicho sin rodeos (no me culpen), la transición de lo remunerativo a lo contributivo no significa la transición a un sistema que se autofinancia y, por lo tanto, no puede preocuparse en absoluto por la demografía y el crecimiento. El dinero siempre proviene de las aportaciones de los trabajadores actuales en activo, pero con las aportaciones se puede pagar un poco menos a los actuales pensionados.

¿Y los futuros?

Sin crecimiento económico y demográfico, como me habrán oído decir varias veces, ni las retribuciones ni los métodos contributivos ofrecen garantías de sostenibilidad. Ambos métodos se aplican a un sistema de reparto, es decir, se basan en que hay alguien que está pagando las aportaciones (no: las ha pagado. ¡Las está pagando!).

Y para cotizar hay que nacer, hay que trabajar y hay que ganar.

Tres cosas que, tras la austeridad, se han vuelto todas más difíciles, especialmente la última, por las razones que resume el conocido gráfico:

Aclarado el malentendido, cuando pueda volveré a algunos comentarios interesantes del post anterior, reconociendo a Anto y Alberto49 por haber planteado ciertas cuestiones en tiempos desprevenidos , en los que nunca hubiera pensado tener que lidiar con pensiones por trabajo.


Esta es una traducción automática de una publicación escrita por Alberto Bagnai y publicada en Goofynomics en la URL https://goofynomics.blogspot.com/2024/01/contributivo-retributivo.html el Fri, 19 Jan 2024 15:57:00 +0000. Algunos derechos reservados bajo la licencia CC BY-NC-ND 3.0.