Superbonus, todas las faltas del ex ministro Gualtieri

Superbonus, todas las faltas del ex ministro Gualtieri

Superbonus: lo que se dice y lo que no se dice. El punto de vista de Gianfranco Polillo

En Cernobbio, Giuseppe Conte apeló al indulto del Tribunal. Consciente del grado de frialdad, y sin culpa del aire acondicionado, en aquellos salones de estuco y candelabros de cristal, se limitó a decir, casi en un susurro, el bono del 110 por ciento "ha generado crecimiento, no se convierta en un chivo expiatorio”. Defensa más que débil ante los ataques de la competencia. “El superbonus – instó Calenda, líder de Acción – fue una locura, quizás uno de los mayores despilfarros de dinero en la historia republicana”. Mientras que el ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti, con la mano puesta, confesó: "pensarlo me da dolor de estómago".

EL HECHO RESULTA DE LOS ATAQUES AL SUPERBONUS

Afectados en el corazón, los de Il Fatto Quotidiano intentaron eludir la cuestión, es decir, un juicio sobre el mérito de las disposiciones legislativas "hechas 5 estrellas", lanzándolas a la política. O mejor dicho, como dicen en Roma, en caciara. "Cuando al 110% le gustó la "medida útil para relanzar la economía": este es el título de una investigación detallada, no difícil gracias a Internet, sobre quién había dicho qué. Evidentemente todo en señal de corroborar la tesis de una corrección en el atroz crimen contra las finanzas públicas. Como si fuera tarea primordial de la oposición y no del gobierno garantizar la estabilidad de las finanzas públicas.

Además, el hecho de que el Conde II, después de los desastres del Conde I sobre la renta básica, no haya encontrado la más mínima resistencia lo demuestra el crecimiento frenético de la deuda pública. Que en 2020 aumentó 20,8 puntos del PIB, casi el doble de la media europea (excluida Italia): el mayor salto desde 1980. Algo que hace palidecer aquellos años en los que, por mucho menos, los gobiernos (especialmente los socialistas) fueron acusados ​​de querer socavar las finanzas públicas italianas. Ciertamente en aquellos años la deuda pública había crecido, pero junto con el PIB: hasta el punto de que los ingresos italianos habían superado a los ingleses.

LO QUE HA HECHO EL GOBIERNO EN EL DEF

Pero volviendo a los disparatados costes de la construcción (el bono de fachada, el súper bono del 110 por ciento y el bono por terremoto), el Gobierno, en el Def, presentado el pasado mes de abril, había intentado una primera evaluación de los posibles costes. En un prospecto detallado se preveía que el gasto total, inicialmente estimado en 72,32 mil millones de euros, equivalente al 3,6 por ciento del PIB (ya de por sí una locura), habría aumentado a 116,13 mil millones de euros. Con un aumento del 60 por ciento. Unos meses más tarde, sin embargo, resulta que esas sombrías predicciones eran más que optimistas. Los nuevos cálculos hablan de un coste total para el erario público de más de 153 mil millones de euros. Eso es el 7,5 por ciento del PIB. En porcentaje, más del doble del gasto previsto inicialmente.

Los informes hablan de cierto mal humor gubernamental hacia la Contabilidad General del Estado, acusada de excesiva negligencia al predecir las posibles consecuencias de unas normas creadas gracias a la presencia europea (las directivas sobre ahorro energético), pero utilizadas sobre todo con fines electorales indescriptibles. . Ni más ni menos como había ocurrido con los ingresos de los ciudadanos: hipotetizando una inserción laboral que nadie se comprometería jamás a conseguir y nadie, sobre todo, a controlar.

LAS RESPONSABILIDADES DE GUALTIERI

Antes de entrar en detalles sobre posibles responsabilidades administrativas, conviene recordar que el entonces ministro de Economía era Roberto Gualtieri , actual alcalde de Roma. Si, como es lógico, debe haber responsabilidad, ésta sólo puede recaer en primer lugar en el jefe del dicasterio. Luego descenderemos por las ramas de la organización burocrática. El problema, sin embargo, era esencialmente legal. La norma creó un "derecho subjetivo" a favor de los propietarios. Dada la expansión de la propiedad inmobiliaria en Italia, esto significaba garantizar a más o menos a todos (ricos, pobres, hombres, mujeres, bellos o feos) un regalo estatal.

La experiencia pasada había enseñado que, para limitar al máximo el riesgo de una posible crisis financiera, era necesario limitar al máximo el número de beneficiarios (por ejemplo, ingresos más bajos) o, de lo contrario, crear un fondo al que acceder hasta su agotamiento total, previendo procedimientos administrativos rigurosos. Ambas soluciones fueron rechazadas por obvias razones electorales. ¿Cómo podría haber sido posible "derrotar la pobreza" de los propietarios, limitando el beneficio?

La causa original del posterior desastre financiero reside en esta mala interpretación jurídica. Lo que pone en duda a los distintos ministros que participaron en la redacción del proyecto de ley. Pero sobre todo el Ministro de Economía, que tiene la ingrata tarea de supervisar el tesoro de la República. Se comprende así la profunda diferencia con lo ocurrido en el pasado. En 2006, Giulio Tremonti, entonces ministro de Economía, fue cubierto de insultos y acusaciones falsas por haber devastado las cuentas del Estado con las amnistías y la delegación fiscal.

En cambio, dejó recursos inesperados a su sucesor Tommaso Padoa Schioppa. Ese famoso "tesoro" que más tarde se convirtió en uno de los eslóganes de la XV legislatura (Gobierno Prodi). La amnistía había provocado la aparición de un buen número de evasores que, una vez conocidos por las autoridades fiscales, no pudieron volver a ocultar sus ingresos. Por lo tanto, tales acusaciones eran totalmente injustificadas, como lo demostraron datos posteriores. Pocas defensas avanzadas. La misma desatención que tenemos hoy hacia Roberto Gualtieri. Si no fuera por los datos que ponen de relieve sus responsabilidades: de ese aumento de 20,8 puntos del ratio deuda/PIB a 132.000 millones de euros (por ahora) en la mayor utilización de las primas de construcción distribuidas. Ese legado negativo que corre el riesgo de secar las finanzas italianas en los próximos años.


Esta es una traducción automática de una publicación publicada en StartMag en la URL https://www.startmag.it/economia/superbonus-colpe-gualtieri/ el Tue, 05 Sep 2023 05:22:31 +0000.