El caso Santanché entre la política y el derecho

El caso Santanché entre la política y el derecho

Lo que se dice y lo que no se dice del caso Santanchè

Si Daniela Santanchè, ministra de Turismo, hubiera mentido en el Parlamento habría sido especialmente grave. Según los mejores constitucionalistas, el Parlamento es un órgano de soberanía popular. Mentir allí, en virtud de lo dispuesto en el inciso 2 del artículo 54 de la Constitución ("los ciudadanos a quienes se encomiendan funciones públicas tienen el deber de cumplirlas con disciplina y honra") equivale, por tanto, a ofender a toda la Nación. Al mismo tiempo, sin embargo, existe una restricción para la oposición.

El delito de calumnias, a que se refiere el artículo 368 del Código Penal, es igualmente odioso. Además, la mayoría y la oposición deben ser solidarios respecto de ese paralelismo entre "derechos inalienables" y "deberes imperativos" (artículo 2), que constituye uno de los fundamentos principales de nuestra Constitución. Y que, frente a la situación actual, se traduce en la facultad de actuar que, sin embargo, debe ir acompañada de un sentido de responsabilidad.

EL CASO SANTANCHÈ Y LA DEFENSA DEL ESTADO DE DERECHO

Reconstruir la historia, por tanto, a la luz de las disposiciones de la ley, que regulan la materia, es fundamental no solo para el ministro Santanchè, sino para sus propios acusadores. Dada la trascendencia del caso, se hace imprescindible determinar quién antepone su interés partidista al cumplimiento de parámetros constitucionales, en defensa del Estado de derecho. En un momento, entre otras cosas, especialmente delicado, dados los escollos provenientes del mundo de las autocracias. Que buscan golpear en el corazón del Occidente "decadente".

La información de garantía está regulada, en Italia, por el artículo 369 del Código de Procedimiento Penal que dice: "sólo cuando tiene que realizar un acto al que el defensor tiene derecho a asistir, el fiscal envía por correo, en carta certificada certificada con acuse de recibo, al investigado y al ofendido, garantía de información con indicación de las disposiciones de ley que se presumen infringidas, la fecha y lugar del hecho y con invitación a ejercer la derecho a nombrar un defensor de confianza".

Como se puede apreciar, la ley, contrariamente a lo que se cree, no prevé ninguna garantía específica a favor del presunto imputado. Pero solo hace clic cuando el Pm. debe realizar los llamados "actos garantizados" en los que es indispensable la presencia del abogado defensor, so pena de nulidad de la propia escritura. Se trata en particular del caso de una evaluación técnica irrepetible (ex art.360c.pp), del interrogatorio; de la inspección; careo (según el artículo 364 del código penal), allanamientos y aprehensiones (según el artículo 365 del código penal). Caso que, hasta donde sabemos, no se había planteado en el caso de las disputas contra el Ministro.

Sólo cabe añadir que la forma de comunicación es obligatoria: “por correo postal, en carta cerrada certificada con acuse de recibo”. En ocasiones, sin embargo, la Policía Judicial, debiendo proceder a la notificación de una información de garantía, convoca al imputado en sus oficinas haciéndole, al mismo tiempo, elegir domicilio para notificaciones posteriores. En cualquier caso, no obstante, siempre existe prueba documental (la carta certificada o el informe levantado en las Delegaciones de Policía Judicial) que acredite la comunicación.

INFORMACIÓN DE INVESTIGACIÓN Y GARANTÍA

Daniela Santanchè declaró en varias ocasiones, tanto durante el debate en el Senado como en los días siguientes, que nunca había recibido información de garantías, según lo dispuesto por el artículo 369 del código penal. ¿Mente? La carga de la prueba debe recaer en los acusadores. Mientras no se dé, la palabra de uno es válida. Eso debería ser suficiente para cerrar el caso. Pero solo para reabrir inmediatamente otro. En las denuncias que se leen en los medios se mencionan las fechas en las que los principales diarios italianos habrían dado cuenta de investigaciones contra el Ministro.

Marco Travaglio, con un fastidio digno quizás de mejor causa, indica las fechas (el pasado 3 de noviembre) en que la noticia habría sido difundida por los distintos diarios: il Fatto , il Corriere , la Verità e il Giornale ” (que olvidado y menciona un 'aviso de garantía' inexistente)”. En el mejor de los casos, esto último es un obvio desliz de la lengua, dado lo que declaró el Ministro. Lo cual constituiría, de no probarse, las condiciones para el posible delito de calumnia.

Pero independientemente de esta última consideración, no es lo mismo realizar consultas y enviar información de garantía. La iniciación del procedimiento es un simple preliminar. Puede llevar al archivo del caso, una vez comprobada su inexistencia. Así como transformarse en algo más grave como la acusación, a través de la información de garantía. Que no es otra que la invitación que se hace al investigado para que busque un abogado penalista, a quien pueda asignar su defensa. En este intervalo la atención no es ni pescado ni ave. Vive en un limbo que puede conducir al infierno de su posterior condena o al paraíso de su absolución.

LA MOCIÓN DE CENSURA: UNA MOVIMIENTO POLÍTICO

En este intervalo suspendido, haber presentado una moción de censura en el Parlamento no es más que un movimiento político. Es decir, una decisión que ignora el fondo de los temas, basándose únicamente en los "rumores" de algunos informes periodísticos. A su vez -lo que es aún más grave- un elemento clave de ese circuito mediático-judicial que tanto impacto ha tenido en el acontecer político del país. Una moción que, en todo caso y con toda probabilidad, será rechazada, por carecer de la fuerza disruptiva que sólo puede dar una verdad irrefutable.

¿Cerrará también la historia? Este seguro. Luego será cuestión de esperar los avances de la investigación. Siempre que este último haya comenzado. Pero esa será una historia completamente diferente. En el cual los electores serán nuevamente llamados a juzgar. No solo en el caso específico. Sino en la parte en comedia interpretada por cada uno. Y sobre eventuales errores -el caso Tortora nos enseña aún hoy- a subsanar, a evitar que un país, lidiando con los dramáticos problemas del momento, se vuelva a distraer con demoledoras regurgitaciones justicialistas.


Esta es una traducción automática de una publicación publicada en StartMag en la URL https://www.startmag.it/mondo/daniela-santanche-informazione-garanzia-parlamento/ el Mon, 10 Jul 2023 05:40:36 +0000.